Magia pasó por el detector ahora sin ruidos, y para festejar, delante de todos le pegó un beso a la petaca y le convidó JD a la chica del barco, que no salía de su asombro.
Después pasó Clarita. PRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRR !!.
A Clarita le sonó una prótesis. Normal en éstos casos.
Y por último, pasó Betty. Nada.
Respiré aliviada, todos los empleados sonrieron cómplices y fuimos a las apuradas a dejar algunas cosas al guardarropas. Betty no se desprendió de su carterita de mano, por los remedios.
Cuando entramos al primer barco, Betty nos llevo a todas al baño, porque la noche iba a ser larga y según ella, hasta nos íbamos a dejar "la chocha" en las sillas de las maquinitas así que mejor hacer pis ahora.
Llegamos al baño, Berta trabó la puerta, y Betty sacó un pequeño adminículo, más chiquito que su propia mano. Berta sacó un encendedor...
Betty: - ¡¡¡ Bueno chicas, para que todas tengamos suerte !!!.
Salimos del baño con los ojos chiquitos y rojos, como cinco pendejas de secundaria después de una travesura.
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